domingo, 18 de septiembre de 2011

Benvenuti a Torino

Pues ya estoy en Torino, y después de dos días, puedo decir, ¡este sitio me gusta!, ¡estoy contenta!
Llegué el jueves a eso de las dos de la tarde al aeropuerto, que como el típico de ryanair queda a una media hora del centro de la ciudad. Cogí un bus, que en 40 minutos me plantó en plena estación Porta Nuova, cerquísima de mi residencia. Un bus, del año 250 AC, con un conductor del año 250 AC, sin aire acondicionado, típico de la época de cuentame que te va repartiendo por los hoteles de benidorm, pero en el año 2011. Maleta en mano y acompañada de un grupo de españoles, a comer, y para empezar con buen pie, como no, un poco de pizza (movimiento de mano característico). Ya por la tarde, y aún sin asimilar donde estaba, pateamos la ciudad, como auténticos turistas, para comprar un móvil italiano, gratis entre todos los erasmus y lo más importante, papel higiénico. De hecho, en las primeras fotos erasmus, el protagonista principal es el papel.
El viernes, tocaba madrugar para ir a la facultad (università degli studio di Torino) y para empezar a rellenar papeles y papeles. Visita rápida a mi coordinador y un buen plato de pasta hicieron una mañana de los más completa. Por la tarde, que nervios, que nervios, marcha de unos cuantos km, yo sola, con vaqueros largos, mapa en mano, un calor de la leche, porque si amigos mios, en Torino hace calor, 35 graditos para ser exactos, rumbo a lo desconocido, tocaba conocer a mi supervisora del proyecto. Una chica encantadora, Benedetta.
Ya por la noche, una birra moreti, terminó por refrescar el caluroso día.
Hoy sábado, el plan estaba claro, asaltar el carrefour, toallas, productos varios de aseo y principalmente comida. Queda como a unos 30 minutos en tranvia desde mi calle, y como Esther no tiene ni brazo de culturista, ni ganas de cargar con tropecientas bolsas, pues se ha llevado la maleta, si si, la sansonite, verde pistacho, por todo el centro comercial, más chula que un ocho. He sido la envidia de cuantos me veían.
Ahora en la resi, reponiendo fuerzas y ordenando todo. Creo que esta noche toca fiesta.

Un beso gigante para todos. Cuidaros mucho, y no me olvideis!!!

Pd: Os pongo la dirección en el lateral del blog, para que me asalteis a cartas.



" A veces lo que esperas es peor si lo comparas con lo inesperado. La razón por la que nos aferramos a nuestras esperanzas es que lo que esperamos es lo que nos mantiene vivos, en pié, esperando. Esperar es sólo el comienzo, lo inesperado es lo que cambia nuestras vidas "

1 comentario:

  1. weno weno weno! quién hubiera podido verte con la maleta por el carrefour!! xDDDDD

    gracias por responder de antemano a la pregunta: "¿estás contenta?"

    me alegro mucho chati, seguiré esperando tus nuevas aventuras!

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